El nuevo propietario de Twitter, Elon Musk, decidió restablecer algunas cuentas que habían sido suspendidas permanentemente por violar las reglas de la red social, como la del controvertido autor Jordan Peterson, la comediante Kathy Griffin y el sitio de noticias satíricas The Babylon Bee.
Por otro lado, el multimillonario también expresó que “aún no se ha tomado una decisión acerca de la cuenta de Trump”.
En su perfil de Twitter Musk escribió que la nueva política de la compañía “es la libertad de expresión, pero no la libertad de alcance”, lo que significa que los tuits que contengan mensajes de odio se desmonetizarán y no serán promovidos, aunque la red social no planea bloquear enteramente la cuenta que publicó el mensaje. El magnate agregó que no será posible encontrar un tuit una vez haya sido desmonetizado “a menos que se busque específicamente, lo cual no es diferente del resto de Internet”.